miércoles, 16 de mayo de 2012

Llora como un indignado lo que no supiste defender como un hombre --By Alej


AVISO: ESTE CONTENIDO NO TIENE QUE VER DIRECTAMENTE CON MI MATERNIDAD, SÍ CON LA EDUCACIÓN QUE, ENTIENDO, DEBO DAR A MI HIJA.

 
INDIGNADA DE (CIERTOS) INDIGNADOS

No digo que salir con la cualificación que una carrera o estudios superiores te da y encontrarte con este panorama no tenga que repatear las tripas.
Esas noches de café y ronquidos de vecinos no han servido para nada. Sin duda esto apesta.
Esta situación apesta.
¿Por qué?
Cada vez que lo pienso me crispo un poquito más. ¿Los políticos? ¿Los banqueros? ¿O tú?

La (falta de) toma de decisiones a nivel político.

El robo de los banqueros.

Tu robo. O el de tus padres. 

Si tú o tus padres no habéis aprovechado el boom para vender ese pisito de cuatro millones en la playa por veinticinco, si tú o tus padres no habéis tirado de albaranes y talones al portador. Su tú o tus padres no habéis contratado mano de obra extranjera/poco cualificada/ barata. Si tú o tus padres no habéis aceptado dinero en “Barcelona” como gratificación/complemento no figurado en nómina en vuestro trabajo. Si tú no has comprado nada en empresas que no pagan sus impuestos en España. Si tú no te has embarcado en un piso de 80 m2 por unos módicos 300.000 € (por lo bajo) porque “te lo daba el banco”. Si tú no has aprobado la entrada de una empresa que cobra menos porque es sin IVA y mediante varios cheques al portador en tu Comunidad de Propietarios. 
Si a ti no te suena nada de todo esto, indígnate.  Pero incluye a tu vecino como objeto de tu indignación.
Tan culpable es el que roba como el descerebrado que contribuye.

Nosotros, los habitantes de nuestro país de pandereta, arremetemos con los cuatro ladrones más llamativos “¡Que paguen ellos!”, y no nos paramos a pensar en que la pillería nos corre por la sangre y que si nuestro robo no ha sido mayor ha sido por falta de oportunidades.

Pero no solo eso, no solo no escrituramos viviendas por debajo de lo que hemos pagado por ellas, no, además contribuimos a comprarlas. Así, a precio de lujo la tabiquería de papel de fumar. Y cuantos más habéis comprado, más han subido.

Y ahora gente como yo, que no me he comprado una casa PORQUE NO ME HA DADO LA GANA contribuir a ese ROBO y tomadura de pelo,  no temo perder una casa que me han vendido como mía.  Porque ese es el fallo. Te hacen creer que pagas tu casa. Durante toda la vida. Esclavizándote a ella y a su deuda. Y obedientemente pagas. Hasta que la bomba estalla.  Y dejas de pagar porque, simplemente, no puedes. Los cabrones banqueros… han aplicado lo que TÚ firmaste un día.

He tenido que renunciar a muchas cosas por no tener propiedades inmobiliarias. Pero he “ganado” muchas otras.
Eso sí, ahora, tú y yo no podemos ser iguales. Siento tu pérdida, pero sólo tú te metiste ahí. Incluso tuve que soportar tu condescendencia.

La vivienda, nuestros gobernantes, nuestros préstamos, nuestras facturas, nuestra honradez y dedicación en el trabajo, todo ello ha dependido de nosotros. De nuestra firma, de nuestro voto, de nuestra responsabilidad.

Y ahora te vas, corriendo a indignarte. A que otros hagan por ti lo que tú no has sabido hacer -o  tus padres-
A arremeter contra aquel que ha robado o contribuido al robo, sin percatarte que tú has hecho lo mismo.

Y continúas quejándote sin ofrecer alternativas. Sigues quejándote por “no poder”, enmascarando tu “no querer”. Y  los fines de semana colapsas el centro comercial. 

Porque aquellos que no quisieron renunciar a algo en su día, les toca hacerlo ahora. Y como son más, lo hacen en grupo, para presionar. Pero no por eso tienen más razón.
Lo que más me jode de todo esto es que los justos y pecadores están en el mismo saco. Y se dan la mano en Sol.
La autocrítica es esencial para cualquier cambio. Es la única alternativa que veo a esto. Es la única forma de tomar conciencia real de lo que ha pasado y actuar en consecuencia.

Nuestros políticos, nuestros ladrones, no nos van a resolver algo que debe de nacer de nosotros.  Ellos son la sombra de lo que proyectamos. La consecuencia. Ellos son como hemos sido nosotros, pero a gran escala.

No os indignéis. Es insuficiente. Revolucionaos. El movimiento de los indignados ha abierto un debate político, algo es algo. Aprovechémoslo. Tomad conciencia de vuestras cagadas, no siempre voluntarias o conscientes y utilizad eso para mejorar el lugar en el que crecerán vuestros hijos. 

Los grandes países se forjan con grandes personas. De eso estoy segura.

CLC 

5 comentarios:

  1. Qué bien expresado y qué ameno de leer!

    El artículo es digno de aparecer en un periódico de tirada nacional. ¡Pero qué digo! Yo he leído cosas en los periódicos que parecen escritos por críos de la ESO. Sin embargo tu escrito está muy por encima de los que escriben ésos qué dicen llamarse periodistas.

    Manuel

    PD: yo también me indigno con los que te indignas tú, y por supuesto también me indigno por no escribir tan bien como tú.

    ResponderEliminar
  2. Querido,
    Te acabas de comportar como la yaya...
    TQ+
    CLC

    ResponderEliminar
  3. yo apoyo a manuel, ojala pudiese escribir asi! ademas mola el articulo aunque no se puede generalizar ya que el colectivo de indignados es muy grande y con muchas razones diferentes.

    El artículo debería llamarse "Llora como indignado lo que no supiste defender como hombre"

    Pero el problema no son los indignados, son los jetas

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No quería generalizar, me dirijo a ese grupo que llora ahora y reía ayer.

      CLC

      Eliminar
  4. CLC!!! que te dejé un premio no sé si lo sabes!
    http://www.portandootroangelito.com/2012/05/premio-dardos.html
    Besos

    ResponderEliminar